Tan sólo dos días después de cumplir los 61 años, el cantante y compositor Greg Trooper falleció de un cáncer de páncreas con el que llevaba luchando desde hacía algún tiempo. Su cumpleaños fue el pasado domingo 15 de enero y su muerte tuvo lugar el miércoles 17. Una auténtica pena ya que se trataba de un gran músico capaz de aunar el rock con la música Americana, el folk y el country. Un talento para musicar historias de gente corriente, de vidas sencillas, de problemas cotidianos con unas melodías emotivas y arrebatadoras.
Greg Trooper nació el 13 de enero de 1956 en Neptune Township, una localidad de casi de treinta mil habitantes situada en el condado de Monmouth, en Nueva Jersey, muy cerca de la costa, a casi una hora en coche de la capital del estado, Trenton, y poco más de Manhattan. A principios de los setenta no resultaba nada raro ver a un jovenzuelo Trooper merodeando por los clubs de folk del Greenwich Village muy interesado en convertirse en todo un cantautor. Ya en 1976 se trasladó a Austin, Texas, y más tarde a Lawrence, Kansas, para estudiar en su universidad y al mismo timpo seguía insistiendo en formarse como músico y desarrollar sus cualidades naturales como guitarrista, cantante y compositor.
Pero su definitivo lanzamiento como músico tuvo que esperar a bien entrados los ochenta, cuando regresó a Nueva York y armó su propia banda, The Greg Trooper Band, en la que figuraba el guitarrista Larry Campbell, miembro de The Woodstock Mountains Revue y que ha tocado con músicos como Bob Dylan, el batería de The Band Levon Helm, el bajista de Grateful Dead Phil Lesh, la banda que surgió de la Jefferson Airplane, Hot Tuna, o The Black Crowes, por citar unos pocos (y muy significativos). También contaba con el bajista Greg Shirley y el batería Walter Thompson. Con su apoyo, Trooper grabó en 1986 su disco “We Won´t Dance” y seis años más tarde “Everywhere”, al que la crítica de todo el mundo aclamó como el excepcional disco que es.
Y eses justo, el álbum que nosotros elegimos para nuestra sección “Disco Recuperado de Plástico Elástico”. Un álbum grabado en New Breed Studios de Nueva York, con la producción de Stewart Lerman, un neoyorquino que ha ganado dos premios Grammy y que ha trabajado con gente como Elvis Costello, Patti Smith, Marshall Crenshaw, Crash Test Dummies, Willie Nile, Regina Spektor, Jules Shear, Neko Case, Sufja Stevens, David Johansen… Impresinante. En esta ocasión Greg Trooper se hace acompañar por TheFlatirons, que son el guitarrista Abel Domingues, el batería Kenneth Blevins y el bajista, una vez más, Greg Shirley. Además de contar con otros músicos colaboradores, cuenta con la participación estelar de las voces de Claire Mullaly en la canción “Every Single Day” y de Rosanne Cash (la hija del mismísimo Johnny Cash) en “Blind Spot”, uno de los mejores cortes del álbum. Un trabajo de gran nivel que seguro que gusta a aquellos que disfrutan con la música de Elliot Murphy, Willie Nile o el australiano Paul Kelly. Grandes canciones de uno trabador eléctrico y urbano, con aromas de calles mojadas, de atardeceres solitarios, de noches para deambulando por calles sumidas en el sueño o el desvelo. Grandísimo trabajo.
Entre su debut hasta la publicación de su última entrega, “Live At The Rock Room”, editado en 2015, Trooper dejó tras de sí trece excelentes trabajos que rezuman sinceridad, honestidad y un enormeo talento para contar historias apasionantes e increíblemente humanas. Siempre sobre esa base de folk y folk rock, acercándose en ocasiones a eso que luego se ha dado en llamar Americana y completando todo con algunos matices del country alternativo, incluso de un sutil heartland rock (algo que en determinados momentos le aproximó a Bruce Springsteen o a Joe Grusecky), la música de Greg Trooper conquistó el corazón de aquellos que le conocían, desde el simple aficionado hasta grandes estrellas del folk y de la música americana como Billy Bragg, Steve Earle o Vince Gill.
Ahora que su vida se ha apagado, su voz sigue resonando con la misma conmovedora fuerza de siempre y su música tan presente para sus fieles seguidores que al tiempo le será muy difícil borrar la huella de este gran intérprete y compositor. Por eso, a modo de tardío tributo, elegimos este álbum como nuestro Disco Recuperado. “Everywhere”, 1992, ZUMA RECORDS.
Puedes escuchar canciones de este álbum en los programas 3.341, 3.342, 3.343, 3.344, 3.345 y 3.346.