Hace un montón de años, tantos que ya no me acuerdo ni cuando fue, vino a España de visita Charles Jenkins. Un tipo encantador y modesto a pesar de ser un músico de primera categoría. Incluso llegó a hacer alguna que otra actuación en solitario y recuerdo en concreto un concierto en la buena sala Gruta 77. Salió a escena con una camisa blanca con chorreras y una guitarra acústica. Nada más. Bueno, eso y su voz y su enorme talento. Y con esas armas dio un fantástico show. Luego se paseó entre el público saludando, con mirada ingenua y sonrisa de satisfacción. Lo dicho, un tipo encantador.
A Charles Jenkins le hemos seguido con atención en toda su carrera, desde que empezó en Adelaide, allá en Australia, como cantante solista con el alias de Chuck Skatt. Luego montó su primera banda, The Mad Turks From Istanbul junto al batería Dominic Larizaa, con la que se trasladó, en un intento de salir adelante, a Melbourne en 1989. La cosa no fue muy allá y un par de años más tarde se separaron. Pero Jenkins y Larizza, que se había pasado a la guitarra, siguieron adelante. Dominic llamó a su hermano, Arch, que había tocado en The Saints, para que ocupara plaza como bajista y de batería entró Derek Smiley. Inicialmente se bautizaron como Chuck Skatt And His Icecream Hands, aunque poco después lo acortaron a Icecream Hands, un nombre que estaba sacado de la canción “Flavour Of Night” de Robyn Hitchcock y con el que los ingleses, siempre tan finos para todo, denominan discretamente a la masturbación.
Con esta denominación publicaron primero con el sello Rubber Records un EP con seis canciones y ya en 1993 su álbum de debut, “Travelling …Made Easy”, el cual fue editado en Europa dos años más tarde a través del magnífico sello alemán Blue Rose, que añadió cuatro cortes más, uno compuesto por Jenkins, otro entre el bajista en ese momento, Douglas Lee Robertson, él y dos versiones, una de la canción “Executioner” de Robyn Hitchcok, incluida en su álbum “Eye” de 1990, y otra de la deliciosa pieza “Swingin´Party”, escrita por Paul Westerberg para el LP “Tim” de The Replacements, publicado en 1985
Hemos decidido incluir ese primer álbum en la sección “Disco Recuperado” de Plástico Elástico porque nos parece un buen ejemplo de power pop australiano. De un power pop diferente al habitual, aunque mantiene ciertos elementos aussies, como el ser muy abierto y despejado, con melodías infinitas y un ligero sentimiento de añoranza, de impotencia. Podríamos sumar varios nombres para que la referencia sea más completa, desde The Replacements, a los que nos recuerdan muchísimo, a Squeeze, pasando por Elvis Costello, los R.E.M., sus vecinos Crowded House o los toques de pop más psicodélico de (no podía faltar) Robyn Hitchcok.
Temas rápidos, medios e incluso alguno lento, semi-balada, con acento de las antípodas. Insuperables melodías de pop, coros edulcorantes, guitarras de una comedida aspereza y energía puesta al servicio de la canción y un cantante que transmite toda la emoción que requiere cada composición.
Por el programa pasarán “The Way She Drives”, “Luana” (del que hay por ahí rodando un vídeo), “Gentle Annie”, “You Can Smile Now”, “Welcome Home Mr. Khan” y “Clancy Of The Overdrive”, aunque podríamos haber elegido otras tantas. El disco tiene material más que suficiente para aparecer en esta sección y sonar en un montón de programas.
Los ingleses lo saben y tú también. Disfruta con Icecream Hands.