El 2 de marzo, el músico holandés Rick Treffers, cantante, compositor y líder de Mist, publicará el disco “Underwater”, una recopilación de canciones, rarezas, versiones y grabaciones en directo de su etapa al frente de esta buena banda. Catorce años han pasado desde que la formación holandesa publicara “We Should Have Been Stars ”, su primer álbum. A partir de ahora, Rick continuará bajo su propio nombre. Hablamos con él para que nos cuente sus planes y revise su pasado y su obra.
Plástico Elástico: Acabas de publicar con Mist el disco “Underwater” con el que cierras una etapa, ¿por qué esta decisión? ¿Por qué ahora?
Rick Treffers: Cuando re-arranqué Mist, con el disco “The Loop of Love” en 2015, ya me pregunté si seguir bajo el nombre o no, porque la banda holandesa de aquel entonces ya no existía como tal y habían pasado más de cinco años. Musicalmente, las canciones que compuse en 2013 seguían más o menos la misma línea ‘Mist’, así que decidí seguir como Mist. Además, había cogido cariño al nombre, y los fans y mi teclista de siempre Ivar Vermeulen también. Pero en los últimos años, he notado que Mist no es el nombre perfecto, y por varias razones: resultó difícil encontrar mi música en Spotify y otras plataformas, porque existen otros grupos con el mismo nombre –entre ellos un rapero del Reino Unido que actualmente está en auge, y ya me llegaron propuestas para tocar en festivales de hip hop en Inglaterra jajaja-. También noté que estaba cansado de explicar que soy Rick Treffers y Mist a la vez, sobre todo cuando tocaba en solitario, algo que suelo hacer cada vez más, porque tocar con mi (nueva) banda es una cosa que no siempre es posible económicamente, por desgracia. El disco “Underwater” ya quería publicarlo en el 2015, pero se retrasó y por eso he podido añadir muchos temas nuevos, porque intuí que podría ser el disco de la despedida del nombre y hay que hacerlo bien y completar cosas pendientes. El hecho de seguir como Rick Treffers, además, me permitirá meter canciones en otros idiomas en un solo disco, algo que con Mist no me gustaba hacer (el “Hey” en español es una rareza, una excepción).
PE: Háblanos de “Underwater”. ¿Cómo hiciste la selección de los temas y qué nos encontramos en él?
R.T.: Al principio sólo quería meter los tres temas del proyecto online “Mist:Period de 2006/2007”, los que no están en el disco “Period”, la cara B “Wanted, Baby”, la remezcla de “Weightless”, las tres versiones, algunas grabaciones de directo del pasado y dos temas (“Game Over” y “The Art Of Letting Go”) que se habían quedado fuera de “The Loop of Love”, pero con el tiempo, compuse más temas dentro de la temática del anterior disco (“Dark Side, Since We’re Friends”) y además, con mi banda en Valencia ya estábamos en plena forma y teníamos ganas de grabar algunos temas en directo. Por ejemplo, la canción “Prepare For Landing” en “The Loop of Love”, suena más electrónico e íntimo. La versión en directo es más cañera, diferente. Mi amigo Gilberto Aubán, teclista en la banda, ya había hecho una versión de “Hey” en español para el concurso de versiones de Mist que hicimos en el 2016 y me gustaba incluirla. Siempre me ha encantado la voz y el estilo de Maria Rodés y la escribí, sin conocerla muy bien, la verdad. A ella le encantó la canción y así lo hicimos, en Madrid, cambiando el tono y adaptando la letra. Lo mismo pasó para la versión acústico de “Fade in Fade Out”, el dueto con Alondra Bentley, una amiga mía que conozco desde el año 2005. La versión de “How To Drain the Swamp?” tampoco tiene mucho que ver con la versión original de la banda en el disco “Bye Bye”. Está grabado en directo en acústico (a pelo) en Las Cuevas de San José en La Vall d’Uixó y se oyen las gotas de la cueva en la grabación, fue muy especial.
Al final se han quedado fuera algunos temas, porque en un CD sólo caben 80 minutos de música.
PE: ¿Qué balance haces todos estos años en el seno de Mist?
R.T.: Mi música y mi amor por los idiomas son mis dos grandes pasiones, y son el motor que me lleva y llevará por esta vida, el nombre es lo de menos. Hacer música a un nivel internacional, además, me ha permitido viajar y conocer otras culturas y mucha gente distinta, en España, Alemania, Chile, EEUU, Francia, Argentina, Finlandia, Holanda, México, Noruega, Marruecos y Bélgica. Ahora quiero ‘abrir mercado’ en Japón, Canadá e Italia, porque quiero conocer estos países mejor.
PE: Este 2017 cumples 50 años y has escrito un libro ¿qué cuentas en él?
R.T: Aún estoy terminándolo. El libro va sobre un tío de casi 50 que sigue haciendo música y sigue viajando por el mundo, aunque no salga en la tele, ni toque en los grandes festivales. Es una historia para reírse y para llorar un poco, entrelazado con relatos de mis giras y experiencias “on the road”.
PE: ¿Qué vas a hacer a partir de este momento y cuándo empiezas “oficialmente” como Rick Treffers (algo que, por cierto, ya habías hecho anteriormente)?
R.T.: El repertorio de Mist sigue actual y tampoco va a cambiar tanto. Es un cambio en sentido práctico. Habrá otra página web, el libro etc. La banda que tengo en Valencia seguirá tocando conmigo, pero bajo el nombre de Rick Treffers. En los años 2007-2010 publiqué tres discos bajo mi nombre en holandés, sí. A partir del 2018, el idioma ya no determina el nombre del proyecto. Habrán discos de Rick Treffers, en cualquier idioma y, tal vez, habrá disco o EP del otro proyecto que tengo: El Turista Optimista.
PE: ¿Qué diferencias musicales, si es que las hay, se van a encontrar tus seguidores?
R.T.: Por ahora la única diferencia que veo es que el próximo disco no va sobre el amor ni el desamor. Va sobre la vida, la muerte, el sentido de las cosas. Musicalmente seguiré en la misma línea, evolucionando poco a poco.
PE: Llevas varios años viviendo en España, ¿cómo es que decidiste mudarte a Valencia? ¿Has conseguido encajar en el modo de vivir español, mediterráneo y valenciano? ¿qué es lo que más te ha chocado, lo que todavía te sigue sorprendiendo, lo que más te gusta y aquello a lo que nunca te acostumbrarás?
R.T.: En los años 90 viví un año en Madrid y unos meses cerca de Barcelona. España siempre me ha gustado y hice muchas giras por aquí. Cuando decidí irme de Holanda en 2011 me encontré con Pablo Maronda, músico valenciano. Me ofreció una habitación en su piso a un precio moderado y acepté. Viví allí en su piso tres meses y luego me mudé al Carmen, en el centro. Conocía Valencia y tenía ganas vivir cerca del mar y no gastarme demasiado dinero. Valencia para esto es perfecto. Si escuchas mis canciones en español, podrás imaginar las cosas que me cuestan y las que me gustan…. Estoy aprendiendo a no tomar en serio todo lo que me dice la gente (y hablan mucho). Si un valenciano me dice ‘tomaremos una birra’, sé que la probabilidad de esto vaya a ocurrir es un 30% más o menos. Va casi todo sobre la marcha y me adapto lo más que puedo. Una cosa que sí me sigue costando es el ruido que provoca la gente, sobre todo en Valencia: petardos, Fallas, acústica malísima de los bares, etc. Pero cada país tienes sus cosas buenas y malas. En Valencia me encanta la vida social, el “pensat i fet” (a veces, jajaja), la luz y el sentido de humor de la gente.
PE: ¿Ha influido este cambio en tus canciones?
R.T.: Algunos me han dicho que las canciones de “The Loop of Love” tienen la luz de Valencia. Personalmente creo que tiene más que ver con envejecer y ver las cosas de una forma más optimista o relativa. Y las canciones en español de El Turista Optimista hablan por sí.
PE: Poco a poco, en los últimos años has ido incorporando una suave electrónica a tus composiciones, ¿por qué? ¿continuará esa tendencia?
R.T.: Esto es porque los arreglos de las canciones las suelo hacer casi todos en mi estudio casero. Trabajo con el Logic Pro y algunos programas como Reason y la electrónica en el pop siempre ha gustado. Solía escuchar mucho al indiefolk electrónica de Tunng, por ejemplo, pero también Radiohead, Björk, Boards of Canada y David Sylvian siempre me han influido en su forma de trabajar. Supongo que la tendencia continuará. Me gusta la combinación ‘acústica/electrónica’, pero también arreglos más de banda. Todo depende de la canción. ¡La canción manda!
PE: ¿Tienes ya preparado nuevo material para publicar bajo tu nombre?
R.T.: Tengo unos 8 temas maqueteadas ya y dos o tres por maquetear. Espero terminar las grabaciones este verano y trabajaré otra vez desde casa y también con Sergio Devece, mi guitarrista y bajista/productor de La Muñeca de Sal y Corcobado.
PE: ¿Cuáles son tus planes para este año?
R.T.: Promocionar “Underwater”, hacer conciertos, terminar y presentar mi libro en holandés (la traducción al castellano espero tenerla en el 2018), terminar las grabaciones del nuevo disco y tal vez habrá un proyecto con una cantautora madrileña donde seré el productor. A ver si todo esto me da tiempo trabajar en otras cosas, suelo trabajar de guía turístico en Valencia para poder pagar el alquiler.
PE: ¿Qué música y qué músicos te interesan actualmente? ¿Qué escuchas?
R.T.: Últimamente escucho bastante a Nils Frahm, Weyes Blood, Teleman, Keren Ann, Bowerbirds, Midlake, Clem Snide, Apparat, Elle Belga (de Gijón), Max Richter, y mis favoritos de siempre Loney Dear, The Innocence Mission, Sufjan Stevens, The Divine Comedy, Radiohead, Matt Elliott, Dusty Springfield, Robert Wyatt, Birchbook, Nick Drake, Nick Cave, Bowie, Rachmaninov, Arvo Pärt, Chet Baker, Brian Wilson, cosas del sello ECM…
PE: ¿El último disco que te has comprado (escuchado que te ha gustado), el último libro, la última película (o serie de tv)?
R.T.: El último disco ha sido “Foreverland” de The Divine Comedy. El último libro “Padre”, de Karl Ove Knausgard, la última película ”Toni Erdmannn”, ¡tremenda!
PE: ¿Eres feliz actualmente? ¿Cómo te ves dentro de 10, 15 o 20 años?
R.T.: Bastante contento, sí. ¡Ya haremos otra entrevista en 10, 15 y 20 años! Seguramente estaré aún más calvo y tendré más arrugas y agujetas y artrosis y todo esto. Pero prefiero componer y disfrutar en lugar de mirar hacia el futuro tanto. Life is short!