Desde que echaron a andar, allá por los primeros días de 2004, los gaditanos Champagne se han convertido en unos habituales de Plástico Elástico. Llegaron a la pequeña pero irreductible aldea hispana del power pop para agitarla con sus canciones pletóricas de melodías pegadizas y magnéticas, adornadas con estribillos simplemente irresistibles, sus deslumbrantes guitarras, eléctricas y potentes cuando hace falta pero también delicadas y tintineantes cuando la ocasión lo requiere, unas armonías vocales muy trabajados y elaborados pero al mismo tiempo simpáticos, refrescantes y encantadores. Canciones con historias y con alma, llenas de matices y variantes, trepidantes. ¿Quién se podía resistir a algo así? Desde luego nosotros no.
Tras grabar su primera maqueta, en la que aparecían siete temazos de puro pop guitarrero, llamaron la atención del buen sello madrileño, experto en este tipo de sonidos y templo de las bandas que deciden tirar por esos angostos territorios, Rock Indiana. Poco después entraron en el estudio La Factoría II, en San Fernando, Cádiz, para grabar con el experto asesoramiento de Josema Dalton nada menos doce gemas de power pop redondo y brillante, en la onda de lo que en aquel momento (y años anteriores) se estaba cocinando en Estados Unidos, especialmente en California. El resultado de esas sesiones fue “Ready, Steady, Go!”, un pedazo de álbum como la copa de un pino que tuvo las ventas habituales en estos casos y la poca repercusión en los medios hispanos que suele tener la buena música sin adornos de modernidad.
Pero entonces hubo un parón y todos pensamos que Champagne había pasado a mejor vida. Pero no, cuatro años más tarde volvieron con un nuevo disco, esta vez cantado en español pero utilizando los mismos ingredientes. La banda gaditana mantenía las vitaminas de su música pero intentaban aproximarse a un público más numeroso. De nuevo con la colaboración de Josema Dalton sacaron adelante un gran disco de power pop con raíces en los Beatles, Knack, Raspberries, Fountains Of Wayne y similares. El LP, compuesto por doce sólidas composiciones, se tituló “Flotando Alrededor” y lo publicó Lucinda Records.
Y entonces otro parón, este todavía más largo. ¡Vaya por Dios! Pero En la primavera de este año 2016, Champagne nos sorprendió con su tercer y mejor trabajo (por ahora) “Beach Closed”, un nuevo conjunto de canciones simplemente demoledoras en donde se dejan ver las claras influencias de clásicos de los sesenta y también posteriores como Gigolo Aunts, Matthew Sweet, Weezer, Fountains Of Wayne, Gin Blossoms… Canciones atemporales, para toda una vida, sin fecha de caducidad. Grabado una vez más en La Fatoría, en esta ocasión con Carlos Hernández (Los Planetas, Lori Meyers, Los Hermanos Dalton, La Habitación Roja, Triángulo de Amor Bizarro…) como productor.
El caso es que Champange ha entregado uno de los mejores discos de pop guitarrero y de power pop que se han hecho en este país. Los gaditanos ha vuelto con el sello Rock Indiana para editar este LP que, tras una soberbia portada, atesora doce auténticos bombazos, como “Tell Me Why”, la canción que lo abre y que, en justicia, no debería de dejar de sonar en las radios o tal vez en alguna película de éxito, nacional o incluso uno de esos blockbuster playeros para quinceañeros con actores guaperas y famosos en bañador. Sería un buen colofón para los títulos de crédito. Pero hay más, como la demoledora “Visiting You”, o “The Van”, con unas guitarras muy poderosas y una melodía puro chicle, o “Where Is Barbara Ann?”, en la que ponen a los Beach Boys a tocar una de los Rubinoos. Y así todas hasta llegar a “Don´t Feed The Animal”, una píldora de power pop emparentada con The Posies o con Redd Kross y con algún adorno glam que la hace deliciosa, y que protagoniza su nuevo videoclip, dirigido por GANGONTAPE.
Este es sin duda uno de los mejores discos del año hecho en España pero también de los que se han grabado en este planeta y con él se anuncia el regreso de una genuina banda de power pop. Esperemos que esta vez Champagne hayan vuelto para quedarse. Se les necesita.
Don´t feed the animal
He wants to bite into your handsIt´s feeling carnivorous
And needs your meat to survive
Your mouth is mine and I´ll do whatever I want
Your bleeding lips make me feel a bit wilder
Don´t think I´m horrible
Take your time
I´m not a criminal
You´d better clean your mind
I torture you peacefully like no other
I can bury you with my words, and I know it
You depend on me to start your life up
Thoughts I can´t reveal sometimes
Surround me like a big satellite
And them I need to cross that thin line
You risk too much to feel alive
So much that you forget to survive
And I become an animal
Imagine you easily
The merit is not just mine
Come crawling to me
Obeying what you heat
You´ve paying a bill that´s not yours with your money
How do you feel being my pet. Is it funny?
Don´t feed the animal
Take your time
Feeling carnivorous to survive
You can´t resist it ´cause I still need you around
You can´t resist it ´cause I still need you around